• El grupo de trabajo de la UE pretende equiparar la geotermia con la energías eólica y solar
  • Siete países participan en proyectos de  936,5 millones de euros

Inmaculada G. Mardones.- Que la  geotermia quiere hacerse un hueco en el mix de energías renovables  que relevarán a los hidrocarburos  es un hecho en Europa. Su aprovechamiento para calefacción crece sin parar en todo el continente. Y la generación de electricidad se expande por Italia, Francia, Alemania y los Países Bajos. Según el Plan de Implementación de la Comisión Europea, la electricidad generada a partir de recursos geotérmicos es hoy completamente competitiva en determinados emplazamientos  a un coste de 0,07 euros / kWh. Ver geotermia profunda

La industria europea se desempeña excelentemente en el sector geotérmico. La calefacción y refrigeración de distritos tiene un  recorrido de éxito para la geotermia. Y  la  geotermia profunda para calentar y refrigerar penetra en la industria y los servicios. Hay 280 plantas de este tipo en Europa con una capacidad instalada total de unos 5 GW. Con unos  200 proyectos en marcha, la capacidad crecerá hasta 6,5 ​​GW en 2020. Es un hecho, pues, que la energía geotérmica puede contribuir a la transición energética hacia un sistema más sostenible. El calor y la potencia combinados, la hibridación con otras energías renovables (solar, biomasa, eólica), el apoyo al desarrollo económico local y sostenible, la seguridad del suministro y la flexibilidad de carga son ya cualidades reconocidas de la energía geotérmica, que recibirá un destacado impulso con el desarrollo del Plan de Implementación.

Para consolidar ese protagonismo el Grupo de Trabajo de Energía Geotérmica Profunda ha elaborado una Declaración de Intenciones, recogida en el Plan de Implementación con una selección de  proyectos de referencia en investigación y desarrollo con los que se confía desbrozar el camino  para alcanzar sus objetivos.

La energía geotérmica es una fuente de energía valiosa y disponible localmente que puede generar electricidad y calor o una combinación de ambos. Con estas características, tiene el potencial de proporcionar alternativas reales para reemplazar las centrales térmicas y los sistemas de calefacción que emiten gases de efecto invernadero, no solo en Europa, sino a nivel mundial, en particular en algunos países en desarrollo. Además, los yacimientos geotérmicos también pueden actuar como almacenes de energía y cementerios de CO2.

El  documento se centra en la energía geotérmica profunda, que puede usarse directamente para calentar, refrigerar o generar electricidad:

-«En la actualidad, el calor geotérmico se usa directamente, dependiendo de su temperatura, en varios sectores: desde la ballenera hasta la industria, la agricultura y la calefacción urbana. Existe un gran potencial para la utilización de la energía geotérmica para la calefacción en Europa. Hay muchos ciudades y barrios europeos con sistemas de calefacción urbana que se pueden abastecer de  recursos geotérmicos locales en lugar de importar combustibles fósiles. Esto puede aumentar la seguridad energética y la estabilidad de los precios, así como la independencia de hidrocarburos de importación. Además, también existe la posibilidad de un mayor uso del calor geotérmico en la industria y la agricultura. El desbloqueo de este potencial se logrará a través de la investigación y la innovación centradas en la mejora de la tecnología y su incorporación al sistema energético. De esta forma, la energía geotérmica (junto con el almacenamiento subterráneo de calor) se convertirá en una de las opciones clave para la transición hacia un suministro de calor 100% renovable en Europa.

102 plantas operativas en Europa

Según el informe actualizado del mercado EGEC (2017), existen 102 plantas operativas de energía geotérmica en Europa, con una capacidad total instalada de unos 2,5 GW, de los cuales 1 GW radica dentro de la Unión Europea. En total, se estima una producción eléctrica anual total de aproximadamente 80 TWh en todo el mundo y más de 12 TWh en Europa. Se espera que la capacidad total instalada en Europa alcance 3 GW en 2020, incluido el mercado turco en rápido crecimiento.

El mercado de energía geotérmica es particularmente dinámico en los EE. UU., Filipinas, Indonesia, México y Kenia, y podría revitalizarse en la UE en el futuro cercano si se utilizan recursos geotérmicos no convencionales (por ejemplo, supercríticos, magmáticos, geopresurizados, extraterritoriales), como la geotermia estimulada (EGS), que podría comercializarse con éxito bajo una gama más amplia de condiciones geológicas.

Modelos recientes indican que la producción de energía geotérmica de la UE podría alcanzar hasta 540 TWh en 2050 en un escenario de descarbonización a largo plazo, siempre que EGS se pueda desplegar a gran escala. En otras palabras, la energía geotérmica podría proporcionar el 12.5% ​​de la demanda de electricidad en la UE y en los países vecinos, si se explotara el 20% del potencial geotérmico disponible. Esta presencia en el mercado energético podría aumentar significativamente si se redujeran los costos asociados a la perforación. En las islas volcánicas, la energía geotérmica podría proporcionar la mayor parte de la demanda de calor y la electricidad renovables.

Las instalaciones geotérmicas se caracterizan por un bajo coste operativo (OPEX) pero una elevada inversión de capital inicial (CAPEX, utilizado principalmente para cubrir los costos de exploración y perforación y la construcción de la planta. Además, los costos de financiación son altos debido al elevado riesgo geológico asociado a  los costes de perforación durante las primeras etapas de exploración. Los inversores en general no están dispuestos a asumir estos riesgos y costos iniciales, lo que representa una de las principales barreras para el desarrollo de proyectos geotérmicos. Sin embargo, los factores de alta capacidad (mucho más altos que para la mayoría de las otras energías renovables) y los bajos costes de operación cercanos al cero y externalidades, resultan muy similares a los de otras energías renovables y tecnologías bajas en carbono.

La experiencia y el liderazgo de las industrias y operadores de la UE, así como la excelencia científica europea, son reconocidos en todo el mundo. Para estimular la energía geotérmica, es necesario reducir costos y mejorar el rendimiento. También es necesario ampliar los condicionantes geológicos en los que se pueden aplicar las tecnologías y potenciar la explotación de recursos no convencionales con tecnologías, incluidas las EGS, disponibles en el mercado. Además, es necesario el desarrollo de sistemas híbridos capaces de integrar la producción de energía de diferentes fuentes renovables y una flexibilidad que permita el aterrizaje suave de la electricidad geotérmica.

Mejorar el impacto ambiental y la aceptación social

La importancia mundial de la energía geotermia ha recibido respaldo político con el lanzamiento de la Alianza Geotérmica Global en la COP21. Una coalición de 42 países y más de 29 socios industriales que se han unido a las fuerzas políticas para aumentar la participación de la energía geotérmica en el mix energético mundial. Esta Alianza aspira a lograr un aumento del 500 % en la capacidad global instalada para la generación de energía geotérmica y un aumento del 200 % en producción de calor de calefacción para el año 2030. Por su conocimiento y liderazgo, ni Europa ni las industrias europeas deben perderse la oportunidad de alcanzar esa meta.

Los objetivos de la Declaración de Intenciones (DOI):

1.- Aumentar el rendimiento del almacenamiento (incluido el calor geotérmico) de energía y su capacidad de bombeo en función de la demanda un 10% sobre la generación bruta y su sostenibilidad durante al menos 30 años para 2030.

2.- Mejorar la eficiencia total de conversión, incluyendo el ciclo base, de las instalaciones geotérmicas en diferentes condiciones termodinámicas en un 10% para 2030 y 20% en 2050.

3.- Reducir los costes de producción geotérmica (incluidos los recursos no convencionales, generación estimulada / o soluciones híbridas que combinan la energía geotérmica con otras fuentes de energía renovables) a menos de 0, 10 € / kWh para electricidad y 0,05 € / kWh para calefacción en 2025 (costes medios a confirmar de cinco plantas en diferentes emplazamientos geológicos, una de ellas de al menos 10 MW de potencia instalada y otra de 40 MW para uso directo)

4.- Reducir los costes de exploración en un 25% para 2025, y un 50% para 2050 sobre la base de 2015.

5.- Reducir el costo unitario de la perforación (€ / MWh) un 15% para 2020, 30% para 2030 y un 50% para 2050 en comparación con 2015.

6.- Demostrar la viabilidad técnica y económica de responder a las necesidades del operador de red en cualquier circunstancia para aumentar o disminuir la producción rampa entre el 60% -110% de potencia nominal».

El grupo de trabajo sobre geotermia profunda identificó a lo largo de 2017, ocho proyectos de investigación e innovación (I + I) que se han incluido en el  Plan de Implementación. En la iniciativa participan Francia, Portugal, Italia, Holanda, Islandia, Alemania y Suiza.  Para garantizar su correcta implementación, se movilizará una inversión aproximada de 936,5 millones de euros, que se cubrirá como sigue: 

  • 456 millones de euros aportados por la industria (fondos privados -49% del total)
  •  342 millones de programas nacionales (36,5%) del total)
  •  138,5 millones de euros provenientes de fondos de la UE (el 14,5% del total, tanto de NER 300 como de Horizonte 2020, incluido el proyecto Geothermica ERA NET en curso

Documento íntegro