La red de evaluación tendrá catorce puntos de sondeo con dispositivos permanentes con fibra óptica y libre acceso al público

Geotermiaonline.com.- El Instituto Cartográfico y Geológico de Cataluña (ICGC) evaluará el potencial de la energía geotérmica superficial que tiene el subsuelo de la ciudad de Tarragona tras un convenio firmado con el Ayuntamiento. El ICGC desplegará una red de monitorización en base a catorce puntos de sondeos en los acuíferos, instrumentados con diferentes dispositivos permanentes como la fibra óptica.

De esta manera se conocerá la distribución de las temperaturas en el subsuelo y la evolución de la posición del agua subterránea. El consistorio quiere incentivar la climatización de edificios en la ciudad con energías renovables, incluida la geotérmica. La geotermia puede ser una fuente de energía renovable para la climatización de edificios y la producción de agua caliente sanitaria.

Tras los análisis de los datos que obtenga el ICGC del subsuelo, se desarrollarán mapas del recurso geotérmico disponible que se podrán integrar en el software libre Geo-SIV a los que se tendrá acceso libre. La información ayudará a impulsar el desarrollo de estrategias de gestión sostenible del uso del subsuelo y a integrar a esta fuente de energía en el Plan de Acción de Energía Sostenible (PAES) de la ciudad.

Tres imágenes de la evaluación del potencial geotérmico del suelo de Tarragona.
Implementación del proyecto XEGCat para monitorizar el potencial geotérmico en Cataluña

La firma del convenio forma parte del proyecto del ICGC para mejorar el conocimiento sobre la disponibilidad y el potencial de aprovechamiento de los recursos geotérmicos en el subsuelo de ámbitos urbanos de Cataluña. Por su parte, el Ayuntamiento de Tarragona, en el marco de sus políticas energéticas, quiere incentivar el uso de las energías renovables, incluida la geotérmica, para climatización de edificios.

La energía geotérmica registra una tasa de crecimiento en torno al 20% anual en Cataluña, de acuerdo con los datos del Observatorio de la Geotermia superficial de Cataluña. Esta energía, junto con el resto de renovables, ayudará a la transición hacia un modelo energético más sostenible, basado en la eficiencia y en el impulso del autoconsumo.

La iniciativa se inspira en las cuencas mineras asturianas de Langreo y Mieres que han permitido climatizar edificios docentes, hospitales y viviendas a costes muy reducidos.

En Langreo y en Mieres existen embalses de agua subterráneas resultado del cese de la actividad minera ejercida durante los últimos dos siglos, mientras en Tarragona se han localizado también acuíferos calientes de notable envergadura, algunos de ellos explotados como balnearios.

En Catalunya, los proyectos de energía geotérmica crecen en torno a un 20% cada año. Existen en el 800 instalaciones de este tipo con una potencia de 50,39 MW. En Tarragona (arriba, imagen aérea de la ciudad) se han identificado hasta tres yacimientos geotérmicos en el entorno de una gran cueva situada en el subsuelo de la zona antigua a la que se accede por la calle Gasómetro.

El proyecto es paralelo al anuncio que Repsol y Enagás han realizado acerca de su intención de instalar en el polígono petroquímico de Tarragona la planta de hidrógeno más grande de España, que cuenta con un presupuesto de cerca de 200 millones de euros.

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