Rabobank calcula hasta diez instalaciones anuales
Inmaculada G. Mardones, Madrid. El banco holandés Rabobank destaca en un informe el rápido desarrollo de la geotermia como recurso energético barato en Holanda para la climatización de sus invernaderos, habitualmente iluminados por bombillas y calentados con estufas, como puede observarse desde la ventanilla de un avión al sobrevolar los Países Bajos.
Los analistas del Rabobank que patrocina al equipo homónimo de ciclismo donde milita Contador, predicen que el aprovechamiento geotérmico se incrementará notablemente, no sólo para ahorrar energía, sino con el objetivo de que el país alcance la cuota de compromiso de uso de energías renovables, sanear el sector financiero y ayudar a que la industria holandesa de invernaderos cumpla los umbrales de emisiones de efecto invernadero. Según el análisis del banco, la energía geotérmica podría reemplazar al 2% del consumo nacional de gas natural a un costo estimado de 1,6 millones de euros.
«El continuo desarrollo de la energía geotérmica refleja la hoja de ruta de la industria de invernaderos holandesa para cumplir sus objetivos de emisiones» ha puntualizado la analista del Rabobank, Clara Van Der Elst. «El sector se enfrenta a una disminución de los márgenes de beneficio, debido al crecimiento de la demanda de energía y al aumento del precio del gas natural. Para un sector de consumo energético intensivo – el 10% del consumo de gas nacional- la energía geotérmica ofrece una oportunidad para combatir el aumento de los costos y conseguir un ahorro de hasta un 50%.
Para los cultivos con demanda de calor intensiva como los tomates y los pepinos, la energía geotérmica puede recurrir a una instalación independiente para una extensión del entorno de las 6 hectáreas, mientras que el resto de otros cultivos de invernadero se pueden agrupar bajo una misma instalación.
Los agricultores pueden sacar ventaja del cambio de recurso energético al sustituir una energía con precios al alza permanente por otra de costes fijos. En Holanda los cultivos de invernadero gozan de precios energéticos subvencionados, además de un marco de incentivos fiscales al uso de energías renovables o fuentes energéticas con bajas emisiones de CO2.
Un nuevo escenario con aprovechamiento de la geotermia – en Holanda hay barrios enteros climatizados con el calor del subsuelo- aumentaría la competitividad de los invernaderos. A estas ventajas sobre el gas natural hay que añadir los bajos costos variables y la vida técnica de la instalación (calor y electricidad combinados) que puede llega hasta los 25 años.
El banco concluye que con la geotermia es más fácil de predecir el marco financiero a corto y largo plazo y resulta más sostenible que el gas natural gracias a la ausencia de emisiones. Si se le compara con otras potentes fuentes de energía renovables como el viento o la energía solar fotovoltaica, la geotermia las supera en tres aspectos: es una fuente energética de relativo bajo costo, es fiable y predecible -no intermitente como el viento o el sol- y se concentra bastante también
«La geotermia es una fuente de energía primaria especialmente adecuada para el alto consumo energético de los invernaderos», explicó Van der Elst. «Esperamos que cada vez sean más numerosos los productores de los Países Bajos que se sumen a su aprovechamiento. Esperamos que su desarrollo y la solicitud de instalaciones crezcan a un ratio entre tres y cinco proyectos anuales hasta 2010 cuando lo hagan a un ritmo anual de diez instalaciones».