Una compañía desarrolla cuatro centrales geotérmicas en los entornos de Estrasburgo, Eckbolstein, Hoenheim y Vendenheim
Las plantas cubrirán el 80% de las necesidades de calefacción del conglomerado urbano
I.G.Mardones.- La compañía Fonroche Géothermie, especializada en energías renovables, construirá cuatro centrales geotérmicas de generación por un montante de 240 millones de euros en los próximos diez años, según ha avanzado su director general Jean-Philippe Soulé. Desde su sede en Pau, suroeste francés, Fonroche aspira a protagonizar el cambio geológico excepcional que experimentará Francia bajo el subsuelo de Alsacia, donde se encuentra un yacimiento geotérmico entre los 3.500 y 4.000 metros de profundidad, compuesto por rocas fracturadas por las que circula agua a unas temperaturas entre los 160ºC y los 200ºC.
La compañía francesa Fonroche Géothermie, especializada en energías renovables, construirá cuatro centrales geotérmicas de generación por un montante de 240 millones de euros a lo largo de los próximos diez años, según ha avanzado su director general Jean-Philippe Soulé. Desde su sede en Pau, suroeste francés, Fonroche aspira a protagonizar el cambio geológico excepcional que vive Francia en torno al subsuelo de Alsacia donde se encuentra un yacimiento geotérmico entre los 3.500 y 4.000 metros de profundidad de rocas fracturadas por las que circula agua a temperatura entre los 160ºC y los 200ºC.
Estas plantas las financiará el fondo de capital riesgo Eurazéo, uno de los más importantes de Francia con participaciones en Danone, Europcar, Accor y Elis, entre otros grupos económicos. Recientemente ha adquirido un 10% de la española Desigual por 285 millones de euros.
Las plantas serán del modelo de la de Soultz-sous-Forets, desarrollada por Ecogi en Ritterhoffen, muy simple. Consiste en bombear agua caliente, recuperar el calor para alimentar una central y reinyectarla en el mismo emplazamiento donde se extrae, para lo que se necesitan dos perforaciones a gran profundidad. La primera en debutar sería a finales del año próximo bien en Estrasburgo mismo, o la de Eckbolstein.
Los proyectos se someterán a información pública a primeros de año. «Daremos prioridad a uno u otro -explica Soulé-, en función de los resultados de las campañas de adquisición geofísica que vamos a desarrollar a lo largo de 2015 y las negociaciones y debates en el territorio con nuestros colaboradores potenciales», entre ellos las industrias y los gestores de las redes de calor susceptibles de interesarse por este recurso gratuito, renovable y disponible permanentemente”.
“Las cuatro unidades de cogeneración que Fonroche planea construir tendrán una potencia media de 6 MW eléctricos y 40MW térmicos, suficientes «para atender la demanda de calefacción del 80% de la aglomeración urbana de Estrasburgo a un precio entre 30% y 40% inferior a la del gas natural», remacha Soulé.
La primera de las unidades podría entrar en funcionamiento entre 2017 y 2018. Antes, habrá que realizar un primer sondeo, valorado en unos 15 millones de euros, para asegurarse de que la temperatura del agua subterránea es la prevista, después el segundo sondeo y poder construir finalmente, la central con un coste del entorno de 30 millones de euros.
Estrasburgo es la segunda plaza económica de Francia (tiene Bolsa) y el cuarto conglomerado urbano, lindante con Alemania. Cuenta con 1.200.000 habitantes en las márgenes del Rin, donde dispone del segundo puerto más importante de esta gran vía fluvial europea.
Generación eléctrica por geotermia
La primera fase de la planta será ejecutada por una unión temporal de empresas constituida por la propia Fonroche y el perforista alemán Herrenknecht Vertical Gmbh y el especialista en sondeos H. Anger´s Sohne. La UTE invertirá 30 millones de euros en el desarrollo de una perforadora adaptada a trabajar en el medio urbano de manera que la torre de perforación, asociada a la red eléctrica local no genere vibraciones ni ruido que moleste a los vecinos, asegura Martin Muller-Ruhe, presidente de Anger´s: «Se escucharán 55 decibelios a 100 metros de distancia, el ruido que genera una conversación».
Los residentes deben disipar sus temores respecto a la entrada en producción, insisten los promotores del proyecto ya que está prohibida la fracturación hidráulica. Las operaciones se realizarán bajo el control de las autoridades del estado, a 100 bares de presión, durante la puesta en marcha y entre 15 y 20 bares durante al explotación, precisó Jean Philippe Soulé. “Eso significa que no se producirán microsismos». Esta referencia alude a las quejas generadas por los pequeños sismos que se han producido cerca de Soultz y Lochwiller debido a la fracturación hidráulica que se ejecutó en la operativa de esta planta piloto deSoultz-sous-Forets (geotermia estimulada), una referencia en el mundo.
Los representantes de Fonroche se han comprometido a tener informada a la población a través de un portal de internet donde se ofrecerán todos los detalles. Y han asegurado que las perforaciones serán aisladas por seis capas para garantizar su estanqueidad y prevenir cualquier tipo de fuga.
«Queremos que la primera central sea una vitrina de esta tecnología”, subrayó M Soulé. “Queremos demostrar que esto funciona y que supone una gran ventaja a la población. Tomaremos todas las precauciones posibles. No nos podemos permitir el mínimo error que conllevaría la moratoria para esta camino que no ha hecho más que empezar.
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