La multinacional japonesa firma varios acuerdos para expandir su negocio en el continente

Inmaculada G. Mardones. – El continente africano será el próximo en despertar al desarrollo, a la vista del apetito de las multinacionales asiáticas -China y Japón, preferentemente- por echar raíces y ser los primeros en vender la tecnología que necesita para salir del subdesarrollo.
Toshiba es un ejemplo. En muy pocos meses, la compañía japonesa ha firmado acuerdos decisivos con sociedades complementarias locales o europeas para convertirse en protagonista tecnológico y llevar la electricidad donde está ausente mediante el aprovechamiento de la energía geotérmica.
Todo el valle del Rift que raja el continente en paralelo al Índico desde Etiopía a Mozambique esconde un yacimiento geotérmico de enorme potencial, sólo explotado hasta ahora por Kenia.
El primero de los acuerdos de cooperación o joint venture suscrito por la filial Toshiba Energy Systems & Solutions Corporation con la financiera RentCo East Africa Limited (RentCo) intenta expandir el negocio de generación de energía geotérmica y financiar proyectos en Kenia y en el África subsahariana en general. RentCo aporta soluciones estructuradas de financiación ya sea directamente a sus clientes o a través de programas asociados para proveedores de distintos activos comerciales en todos los sectores.

Toshiba participa como proveedor global de turbinas geotérmicas con amplia experiencia en la instalación y puesta en servicio de diferentes tamaños de turbinas en todo el mundo. Entre la gama de productos geotérmicos incluye «Geoportable ™», un sistema de generación de energía geotérmica que genera de 1 a 10 megavatios de potencia, con buenas perspectivas para las necesidades del continente africano. La multinacional tiene instaladas 56 turbinas geotérmicas en todo el mundo con una capacidad total de 3,628 MW. Con el 23% de la capacidad instalada es líder mundial. En el sector hidroeléctrico ha suministrado más de 2.000 turbinas hidráulicas con una capacidad combinada de más de 59.000MW.

Por otro lado y en este mismo mes la japonesa ha firmado otro acuerdo global o memorando de entendimiento con la ingeniería y constructora francesa VINCI para desarrollar la cooperación en la construcción de plantas hidroeléctricas y geotérmicas en África. VINCI es un jugador líder global con más de 70,000 empleados y 700 filiales que en 2017 generaron unos ingresos consolidados de 14.000 millones de euros.

Un potencial entre 2,5 GW y 6,5 GW

El director de Desarrollo Comercial de Toshiba, Toyoaki Fujita, se ha congratulado de «anunciar esta cooperación con VINCI Construction, y confío en que nuestra cooperación estratégica traerá un suministro de energía estable y limpia a África. Nuestra experiencia establecida y nuestro know-how en energía hidroeléctrica y geotérmica, combinados con la gran experiencia global en construcción de VINCI Construction, proporcionarán una capacidad de generación esencial que contribuirá al continuo desarrollo económico de África».

África mantiene un alto crecimiento sostenido del PIB y se espera que la demanda de energía aumente hasta los 632 GW para 2040. Además de la energía del gas, actualmente la principal fuente de energía en África, hay expectativas crecientes del despliegue de otras fuentes renovables,  incluida la energía solar, la hidroeléctrica y también la generación de electricidad por geotermia que utiliza los inmensos recursos geotérmicos localizados en el Gran Valle del Rift.

Según la Asociación Geotérmica de los Estados Unidos, hay regiones en las que se puede producir energía geotérmica con un rango potencial de entre 2.5 GW a 6.5 GW. Casi todos los países que rodean al Gran Valle del Rift están mostrando interés por desarrollar la generación geotérmica pero se enfrentan al gran obstáculo de financiar la exploración y coste/riesgo de las perforaciones o los desafíos regulatorios. Programas de Naciones Unidas, el Banco Mundial y agencias de cooperación de los países líderes de la OCDE están contribuyendo en la puesta en marcha de varios proyectos. Kenia la más adelantada, confía en que al menos un 27% de su generación energética proceda de sus recursos geotérmicos.