Defensa desarrolla con tres pymes un prototipo de hangar para emergencias multiusos climatizado con geotermia

Inmaculada G. Mardones.-  No es frecuente asistir a la presentación de un general uniformado y oírle hablar  de eficiencia energética en el ejército. José Luis Orts Palés, director del Instituto Tecnológico La Marañosa (sureste de Madrid), lo hizo en la pasada feria de SICUR con detalles que a la mayoría se le escapan. Como el estratégico acopio de combustibles que los ejércitos exigen para sus desplazamientos , en sus intervenciones frente a catástrofes naturales o en sus destacamentos. Todo ello, sin tener en cuenta el gasto energético durante las operaciones y las pérdidas en las operaciones logísticas.  La presencia del ejército español en Afganistán, según Orts,  ha supuesto  una dependencia cien por cien del gasoil, «con un consumo diario de 30.000 litros, 52 generadores eléctricos, 730 contenedores de 20 pies y una huella de carbono inmensa» .

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Para hacerse una idea, Orts Palés comentó que el ejército estadounidense consumió en la guerra de Vietnam un 175% más de combustible diario que en Afganistan. Y aunque en este último conflicto el ahorro supuso un alivio, las acciones de los insurgentes contra las caravanas de cisternas y la subida de precio de los carburantes fósiles, para la movilización del material militar y la climatización de los destacamentos, han forzado a los ejércitos a tener en mucha consideración otras fuentes energéticas de aprovisionamiento, como las renovables. 

En este campo, el ejército español se ha anticipado en el ámbito de la eficiencia energética al tomar decisiones que ninguna otra administración pública ha tenido el valor de adoptar. La iniciativa partió de 2011, cuando el entonces Secretario de Estado de Defensa publicó la instrucción 56/2011  sobre sostenibilidad ambiental y eficiencia energética en el ámbito del Ministerio de Defensa que se ha convertido en el santo y seña del ejército español, acuciado ahora también por  recortes presupuestarios.

Defensa  inició sus deberes  poniendo en marcha auditorías energéticas en 330 de sus dependencias de más de 30.000 m2 de superficie o por encima de los 400.000 euros de gasto anual en energía. El objetivo no era otro que ahorrar un 20% en el consumo energético para 2016, tal como fija la mencionada circular. En el caso de su propia sede central,  el paseo de la Castellana de Madrid y el hospital militar Gómez Ulla, la implementación de medidas de ahorro energético ha supuesto un descenso del 20,8% en la factura eléctrica en el primer caso y 43,8% en el Gómez Ulla.

La segunda pata de la circular se refería a la investigación en tecnologías que aumenten la eficiencia energética en el quehacer del ejército mediante la colaboración de Defensa con empresas privadas en el desarrollo de ocho instalaciones piloto, al amparo de las dotaciones públicas para proyectos de  I + D + i . «El objetivo es tremendamente ambicioso y complicado», decía el general Orts, ya que «el 80% del consumo energético es operativo».

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Uno de estos proyectos ya está operativo, como hangar piloto  y utiliza para su climatización geotermia, una energía renovable cuya principal característica no es precisamente la movilidad. Su gran ventaja, en el caso de la geotermia somera o baja entalpía, es que se encuentra bajo tierra y que no depende del sol que alumbre o del viento que sople. ¿Una fuente de energía renovable dependiente del suelo para la intendencia de un ejército, cuya actividad se desarrolla en continuos desplazamientos?

 Juan Antonio de Isabel García, director de la compañía Geoter, explica la clave de esta aparente contradicción. en la presentación: «¿Por qué no geotermia? Cuando un ejército se desplaza lo primero que busca para destacar sus cuarteles es agua. Si tiene que explorar y perforar para localizarla, la misma perforación puede servir para intercambiar el calor o frío del subsuelo con los hangares, instalaciones hospitalarias…centro de mando…»

La colaboración público privada en I +D + i puesta en marcha en anteriores legislaturas por el CDTI  a través de programas como Ingenio o Cenit se llama ahora Programa Nacional de Cooperación Público, dependiente del ministerio de Economía. Y a través del suprograma INNPACTO 2012, el Instituto Tecnológico de La Marañosa obtuvo una financiación de 6.903.450,52  euros, distribuidos hasta finales de este año, para desarrollar un sistema modular arquitectónico – Expediente IPT-2012-0231-120000, con una inversión global de 7,9 millones de euros) en asociación con las empresas Geoter (exploración geotérmica), la albaceteña Clymesa, del grupo Campos, especializada en climatización y Gaptek, empresa de Girona con gran experiencia en la construcción de hangares autotransportables y ligeros. Todas ellas son empresas pequeñas (pymes). Y las tres, en estrecha colaboración con el Instituto Tecnológico de La Marañosa, han conseguido desarrollar el proyecto. 

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El primer prototipo del High Efficiency Military Container (HEMC), el hangar modulable y transportable (en versión oficinas) ya se ha instalado en los cuarteles de la Real Maestranza de Sevilla donde permanecerá hasta noviembre próximo. Se trata de un barracón  automontable y desmontables de aluminio de hasta tres pisos de altura, capaz de introducirse como piezas de lego en los clásicos contenedores de 20 pies que se desplazan con facilidad. Es capaz de aguantar cargas de nieve de 0,6KN/m2 hasta 1,6 KN/m2, soportar vientos de 166 kilómetros por hora y sismos de hasta 4º en la escala de Richter. Y lo mismo sirve para dar cobijo a un hospital de emergencia ante una catástrofe, albergar un colegio, acoger a damnificados de un accidente o un albergue provisional, con una superficie de 90 por 90 metros en plano y… climatizado por geotermia. No necesita los clásicos y ruidosos generadores que queman combustibles fósiles para mantener una temperatura de confort.

Más detalles del proyecto en Módulo GreenMar geotérmico y Desarrollo proyecto GREENMAR


 

El Ejército español se gasta al año 668 millones de euros en combustibles

El Ministerio de Defensa inicia la licitación de uno de los mayores contratos para una petrolera en nuestro país

 

Ramón Roca.-El Ejército español se gasta al año más de 668 millones de euros en distintos combustibles. Según la licitación que ha iniciado el Ministerio de Defensa, el presupuesto para  2015 asciende a 668,6 millones de euros repartidos en ocho grandes lotes, según ha publicado el Boletín Oficial del Estado.

La licitación es para toda la flota de buques, aviones, helicópteros, tanques y demás medios de transporte del Ejército. Todos los puertos, aeropuertos militares e instalaciones del Ejército de Tierra se repartirán todos los combustibles.

Los lotes son los siguientes:

Lote 1: Combustibles de uso civil a granel, a depósitos ubicados dentro de instalaciones militares en todo el territorio nacional.

Lote 2: Diésel Naval Destilado (OTAN F-76) a granel, a las Bases Navales en todo el territorio nacional.

Lote 3: Gasóleo a granel clase B para uso marítimo, suministrado en puertos civiles en todo el territorio nacional, y en las Bases Navales que no disponen de depósitos.

Lote 4: Gasolina de aviación de grado 100/130 (OTAN F-18) a granel, depositado en las Bases Aéreas de Villanubla, San Javier y Torrejón, Aeródromo Militar de León y Maestranza Aérea de Sevilla, y en ala de avión en aeropuertos civiles al mismo precio que a granel.

Lote 5: Combustible JET A-1 (OTAN F-35) como sustitutivo del JP-8 (OTAN F-34), en ala de avión, y en caso de emergencia para helicópteros, en aeropuertos civiles en todo el territorio nacional.

Lote 6: Combustible JP-8 (OTAN F-34) a granel, para el Ejército del Aire, depositado en la Base Aérea de Gando y Aeródromo Militar de Lanzarote.

Lote 7: Combustible JET A-1 (OTAN F-35) a granel en Península.

Lote 8: Combustible JP-8 (OTAN F-34) a granel o en terminales interiores del oleoducto ROTAZA, para el Ejército de Tierra y Armada en todo
el territorio nacional.

El proceso de licitación es abierto a cualquier empresa capaz de generar todo tipo de combustibles, es decir, capaz de refinar todos estos productos en España. Por tamaño, Cepsa y Repsol serían las favoritas, aunque BP también podría competir. Además, el Ministerio que dirige Pedro Morenés quiere cerrar el procedimiento cuanto antes, por ello que la licitación es urgente y se decidirá el próximo 14 de octubre. Defensa tuvo un presupuesto de 5,745 millones en 2014, de los cuáles 4.421 fueron a personal del Ejército. De los 1.300 millones restante, el 50% va dirigido para los combustibles.